La película fragmentado dirigida por M. Night Shyamalan, nos sumerge en un entorno oscuro y perturbador donde un personaje llamado Kevin Wendell Crumb, interpretado por James McAvoy, muestra una serie de trastornos de personalidad que desafían la comprensión y despiertan la curiosidad de quienes lo observan. En este artículo, exploraremos los diferentes trastornos identificados en la película y analizaremos cómo se reflejan en la vida real según la psicología.
Trastorno de identidad disociativo (TID)
El trastorno de identidad disociativo, comúnmente conocido como trastorno de personalidad múltiple, es uno de los principales trastornos que se identifican en la película fragmentado. En la trama, Kevin Wendell Crumb presenta múltiples personalidades, cada una con características y comportamientos distintos. Este trastorno se caracteriza por la presencia de dos o más identidades o estados de personalidad distintos, que generalmente se alternan y pueden tener diferentes nombres, edades, géneros y hasta habilidades.
El TID se desarrolla como una forma de defensa frente a situaciones traumáticas o abusivas en la infancia. Cada personalidad se forma como una forma de escapar de la realidad y proteger al individuo del dolor emocional. En la película, vemos cómo las diferentes personalidades de Kevin se manifiestan en diferentes momentos, cada una con sus propias características y motivaciones.
¿Cómo se refleja en la vida real?
Si bien la representación de los trastornos de personalidad múltiple en la película puede ser dramatizada y exagerada, el trastorno de identidad disociativo es una condición real que afecta a algunas personas en la vida real. Aquellos que sufren de TID pueden experimentar lapsos de tiempo perdidos, amnesia y una sensación de estar desconectados de sí mismos.
Es importante destacar que el TID es una condición rara y compleja, y su diagnóstico y tratamiento deben ser realizados por profesionales de la salud mental capacitados. La terapia psicoterapéutica, en particular la terapia de integración de personalidad, es una de las principales formas de tratamiento para el TID.
Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
Otro trastorno que se puede identificar en la película fragmentado es el trastorno obsesivo-compulsivo. En la trama, una de las personalidades de Kevin, llamada Dennis, presenta síntomas claros de TOC. El personaje muestra una obsesión por la limpieza y el orden, y se ve obligado a llevar a cabo rituales y compulsiones para aliviar su ansiedad.
El trastorno obsesivo-compulsivo se caracteriza por la presencia de obsesiones recurrentes e intrusivas que generan ansiedad y compulsiones repetitivas para aliviar esa ansiedad. En el caso de Dennis, su obsesión por la limpieza y el orden se manifiesta en la necesidad de tener todo en su lugar y limpio, y su compulsión es realizar acciones específicas para lograr esa sensación de orden y control.
¿Cómo se refleja en la vida real?
El trastorno obsesivo-compulsivo es una condición que afecta a muchas personas en todo el entorno. Las obsesiones y compulsiones pueden variar ampliamente de una persona a otra, pero en general, generan un malestar significativo y deterioro en la vida diaria. El tratamiento para el TOC puede incluir terapia cognitivo-conductual y, en algunos casos, medicación.
Trastorno de la personalidad borderline
Si bien no se explora en detalle en la película fragmentado, algunos indicios sugieren la presencia de un trastorno de la personalidad borderline en uno de los personajes secundarios, Casey Cooke, interpretada por Anya Taylor-Joy. Este trastorno se caracteriza por una inestabilidad emocional significativa, impulsividad y dificultades en las relaciones interpersonales.
La historia de Casey, marcada por el abuso y el trauma, puede indicar una posible presencia de trastorno de la personalidad borderline. La manera en que se relaciona con Kevin y cómo maneja las situaciones de peligro son indicadores de su inestabilidad emocional y su tendencia a tomar decisiones impulsivas.
¿Cómo se refleja en la vida real?
El trastorno de la personalidad borderline es una condición compleja y desafiante que afecta a muchas personas en todo el entorno. Aquellos que sufren de este trastorno a menudo experimentan cambios rápidos en el estado de ánimo, dificultades en las relaciones interpersonales y una sensación de vacío emocional. La terapia dialectical behavior therapy (DBT) es uno de los enfoques más utilizados en el tratamiento de este trastorno.
La película fragmentado nos brinda una visión ficticia pero intrigante de diferentes trastornos psicológicos. A través de los personajes de Kevin Wendell Crumb y Casey Cooke, podemos explorar los trastornos de identidad disociativo, obsesivo-compulsivo y de la personalidad borderline. Si bien estas representaciones pueden ser dramatizadas y exageradas para el propósito de la trama, es importante reconocer que estos trastornos existen en la vida real y pueden afectar significativamente la vida de quienes los padecen.
Es fundamental buscar ayuda profesional si sospechas que tú o alguien que conoces puede estar experimentando alguno de estos trastornos. La terapia psicoterapéutica, junto con el apoyo de médicos especializados, puede ser de gran ayuda para aquellos que buscan comprender y manejar estos trastornos de manera efectiva.
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