La psicología dialéctica es una corriente teórica que se basa en el método filosófico de la dialéctica para comprender la mente y el comportamiento humano. Esta corriente encuentra sus raíces en la antigua Grecia, con pensadores como Heráclito y Sócrates, y ha sido desarrollada y aplicada en distintos ámbitos por expertos como Enrique Pichon-Rivière.
¿Qué es la dialéctica?
La dialéctica, derivada del término griego dialektiké, se refiere al arte de razonar, discutir y argumentar con discursos. Es un método filosófico que busca investigar y resolver las contradicciones del pensamiento y de la realidad histórica. La dialéctica nos invita a indagar la verdad, entendiendo que esta puede variar según las épocas y los tiempos.
Desde la antigua Grecia, la dialéctica ha sido utilizada para comprender el cambio constante y la lucha entre fuerzas contrarias. Heráclito afirmaba que todo fluye y nada permanece igual, mientras que Sócrates utilizaba la mayéutica, un método dialéctico, para buscar la verdad universalmente válida.
La psicología dialéctica y la adaptación activa
En el ámbito de la psicología social, la psicología dialéctica se enfoca en dos aspectos fundamentales: la modificación de nuestras verdades subjetivas para que se correspondan con la realidad y la modificación dialéctica del entorno social. Esta adaptación activa implica entender la relación entre el individuo y el entorno como conflictiva y de complejidad creciente.
La psicología dialéctica reconoce que el ser humano es producto de sus circunstancias históricas, pero también tiene un papel activo en la producción de dichas circunstancias. En este sentido, se apropia de las metodologías de filósofos como Hegel y Marx, que visualizan el entorno como un proceso en movimiento y establecen la tesis, antítesis y síntesis como etapas típicas de desarrollo.
La psicología dialéctica aplica las leyes de la dialéctica para comprender el comportamiento humano y la interacción social. Estas leyes son herramientas poderosas para analizar y explicar las contradicciones y conflictos que surgen en la sociedad.
Algunas de estas leyes son:
- La ley de la unidad y lucha de contrarios: todo lo que se opone se une y todo lo que se separa está de acuerdo. Esta ley nos ayuda a entender cómo las fuerzas contrarias interactúan y se transforman mutuamente.
- La ley del cambio constante: todo fluye y nada permanece igual. Esta ley nos invita a reconocer que el cambio es una constante en la vida y que debemos adaptarnos a él.
- La ley de la transformación: la dialéctica no solo busca comprender la realidad, sino también modificarla. Esta ley nos anima a ser agentes del cambio y a trabajar hacia una sociedad más justa y equitativa.
La psicología dialéctica propone la aceptación de las diferencias y la sensibilidad hacia los demás. Juan Carlos Volnovich habla de la pasión por la alteridad, refiriéndose a la capacidad de ser otro y de reconocer la diversidad en los demás.
Como profesionales de la psicología social, debemos esforzarnos en refinar nuestra sensibilidad a las diferencias y aumentar la tolerancia hacia los demás. La psicología social no solo debe ser una corriente de pensamiento, sino también un estilo de vida y de acción que promueva la inclusión y el respeto hacia todos los individuos.
La psicología dialéctica nos brinda una visión integral de la mente y el comportamiento humano, basada en el método filosófico de la dialéctica. Esta corriente teórica nos invita a comprender las contradicciones y conflictos que surgen en la sociedad, y nos anima a ser agentes del cambio y promotores de la inclusión y la diversidad.
La psicología dialéctica nos enseña que la verdad es relativa y que debemos adaptarnos y transformarnos constantemente. Nos invita a aceptar las diferencias y a trabajar hacia una sociedad más justa y equitativa. En definitiva, la psicología dialéctica nos reta a ser mejores profesionales y mejores seres humanos.
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