La teoría del orden de nacimiento ha sido un tema maravilloso que ha capturado la atención de muchas personas. Según esta teoría, nuestra posición en la familia puede afectar nuestra personalidad, nuestro coeficiente intelectual e incluso nuestro éxito en la vida. Uno de los personajes más influyentes en esta teoría fue Alfred Adler, un médico y psicoterapeuta austríaco que trató de entender por qué los niños criados en la misma familia parecían tener personalidades tan diferentes.
Adler, quien era el segundo de siete hijos, teorizó en 1927 que el orden de nacimiento tenía un impacto significativo en la personalidad. Según él, los padres trataban a los hijos de manera diferente según su posición en la familia. Además, creía que los padres que comparaban a unos hermanos con otros creaban una sensación de inferioridad.
El impacto del orden de nacimiento en la personalidad
Desde entonces, los investigadores han agregado elementos a la lista de características según el orden de nacimiento. Aquí hay algunas de ellas:
- Hijo mayor: Se cree que los hijos mayores son personas complacientes, responsables, confiables y cautelosas. Sin embargo, también pueden ser mandones y controladores. Tradicionalmente, se ha pensado que los hijos mayores reciben mucha atención de los padres, por lo que cuando llega el segundo hijo, a menudo pueden sentirse descuidados o destronados.
- Hijo del medio: A menudo se cree que los hijos del medio son ignorados y dejados de lado, por lo que tienden a ser pacificadores. Adaptan su personalidad para encajar en el nicho familiar que el hijo mayor ya se ha llevado. Algunos ejemplos famosos de hijos del medio son Bill Gates y Madonna.
- Hijo menor: Se cree que los hijos menores son egocéntricos, manipuladores, divertidos y encantadores. Esto se debe a que deben hacer más esfuerzo para llamar la atención, mantener su independencia y parecer diferentes de sus hermanos. Algunos ejemplos famosos de hijos menores son Cameron Diaz y Mahatma Gandhi.
- Hijo único: Aunque no tienen hermanos con quienes compararse, Adler también tenía algo que decir sobre las características de personalidad de las personas sin hermanos. Se dice que los hijos únicos tienden a ser egocéntricos, independientes, ávidos de aprobación y maduros. A menudo adoptan las características de personalidad del hijo mayor o del menor.
Tener en cuenta que estos estereotipos no aplican a todas las personas y que el orden de nacimiento no es el único factor que influye en nuestra personalidad. Otros factores como el entorno familiar, las experiencias de vida y la genética también desempeñan un papel importante.
La teoría de la competencia y la supervivencia
En 1996, el psicólogo estadounidense Frank Sulloway propuso una teoría para explicar estas diferencias basada en la competencia y la supervivencia. Según Sulloway, cada niño dentro de una familia tiene que competir por la atención y la inversión de los padres para sobrevivir. Esto significa que si el hermano mayor asume el papel responsable de cuidar a los hermanos menores, el siguiente hijo debe encontrar otro rol y desarrollar una forma diferente de participar en la familia. Esto reduce la competencia y mejora la cooperación dentro de la familia, lo que aumenta las posibilidades de supervivencia para todos.
A lo largo del tiempo, los resultados de los estudios han sido inconsistentes. Algunos estudios respaldan totalmente la teoría de Adler, mientras que otros la niegan por completo. Algunos estudios han demostrado que existen diferencias, pero estas no son significativas, y otros han demostrado que las diferencias encontradas se deben al diseño del estudio.
El orden de nacimiento es un tema maravilloso, pero aún queda mucho por descubrir sobre su impacto en la personalidad. Aunque la teoría de Adler ha sido ampliamente discutida, no hay conclusiones definitivas. Cada individuo es único y está influenciado por una variedad de factores que van más allá de su posición en la familia.
La psicología individual de Adler es una teoría de la personalidad que se basa en valores y está plenamente integrada. Es un modelo de psicopatología, una filosofía de vida, una estrategia de educación preventiva y una técnica psicoterapéutica. Su objetivo es fomentar el desarrollo de individuos, parejas y familias psicológicamente sanas y cooperativas, para contribuir de manera efectiva a los ideales de equidad social y vida democrática.
Esta teoría se fundamenta en las enseñanzas originales y el estilo terapéutico de Alfred Adler, e integra diversos recursos adicionales de otros expertos en el campo de la psicología. Proporciona un enfoque psicoterapéutico optimista e inspirador que busca un desarrollo individual óptimo y una responsabilidad social equilibrada.
Teoría de la personalidad
La teoría de la personalidad en la psicología individual de Adler se basa en varios conceptos clave:
Sentimientos primarios y secundarios de inferioridad
Adler sostiene que todos los niños experimentan un sentimiento primario de inferioridad debido a su pequeñez, debilidad y dependencia. Este sentimiento es un incentivo para el desarrollo. Sin embargo, algunos niños pueden desarrollar un sentimiento exagerado de inferioridad debido a dificultades físicas o mentales, paternidad inapropiada o obstáculos culturales y económicos. Además, los adultos pueden experimentar un sentimiento secundario de inferioridad debido a metas compensatorias poco realistas o imposibles de alcanzar. Estos sentimientos de inferioridad pueden afectar negativamente la autoestima y la capacidad de superar dificultades.
Afán de sentido
El afán de sentido es el impulso básico y común de todos los seres humanos de superarse, expandirse, crecer y lograr seguridad. Este afán puede tomar un enfoque negativo, como el afán de superioridad o poder sobre los demás. Sin embargo, también puede ser una fuerza positiva que impulsa el autodesarrollo y la cooperación con los demás.
Compensación
La compensación es la tendencia a contrarrestar el subdesarrollo de funciones físicas o mentales a través del interés y el entrenamiento. Puede ser una estrategia útil para alcanzar logros excepcionales, pero también puede llevar al perfeccionismo excesivo o a una actitud pasiva hacia el desarrollo.
Sentimiento de comunidad
El sentimiento de comunidad se refiere al reconocimiento y la aceptación del carácter interconectado de las vidas de todas las personas. Implica un sentimiento profundo de pertenencia a la humanidad y empatía hacia los demás. Este sentimiento de comunidad puede traducirse en acciones que promueven el autodesarrollo y la cooperación con los demás.
Estilo de vida
El estilo de vida es la organización de la personalidad y refleja el significado que los individuos atribuyen al entorno y a sí mismos. Incluye las metas finales que persiguen, así como las estrategias afectivas, cognitivas y conductuales que utilizan para alcanzar esas metas. El estilo de vida también puede influir en la forma en que los individuos abordan las tareas vitales, como las relaciones con los demás, el trabajo, el amor y el sexo.
Ficción de meta final
La ficción de meta final es una creencia subjetiva que promete una mitigación total del sentimiento de inferioridad y un futuro seguro y exitoso. Esta ficción de meta final puede influir en los patrones conductuales de los individuos.
Unidad de la personalidad
La psicología individual de Adler sostiene que todas las facetas cognitivas, afectivas y conductuales del individuo se consideran componentes de un todo integral que se mueve en una dirección psicológica. No hay contradicciones o conflictos internos en la unidad de la personalidad.
Lógica privada (v/s sentido común)
La lógica privada se refiere al razonamiento inventado por un individuo para estimular y justificar su estilo de vida. En contraste, el sentido común representa el razonamiento acumulativo y consensuado de la sociedad.
Tendencia a la salvaguarda
La tendencia a la salvaguarda se refiere a las estrategias cognitivas y conductuales que utilizamos para evitar o excusarnos de supuestas fallas y fracasos. Estas estrategias pueden adoptar la forma de síntomas, agresión o aislamiento.
Psicología del uso (v/s de la posesión)
La psicología del uso se refiere a la idea de que los individuos hacen uso de sus pensamientos, sentimientos y acciones para lograr un objetivo social. No heredamos o poseemos ciertas cualidades o rasgos, sino que adoptamos características que son útiles para nuestros objetivos y rechazamos aquellas que no se ajustan a nuestras intenciones. Esto resalta la responsabilidad personal de cada individuo por su carácter.
La psicología individual de Adler es una teoría de la personalidad que se basa en valores y está plenamente integrada. Proporciona una perspectiva optimista y equilibrada del desarrollo individual y la responsabilidad social. Esta teoría tiene como objetivo fomentar el desarrollo de individuos, parejas y familias psicológicamente sanas y cooperativas.
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