Padres autoritarios: cómo afecta la psicología de los niños

Los padres autoritarios son aquellos que utilizan normas rígidas y castigos para lograr que sus hijos cumplan con sus expectativas. Aunque estos padres puedan manifestar tener una relación amable con sus hijos, estas prácticas pueden tener consecuencias negativas en el desarrollo emocional y la autoestima de los niños.

padres autoritarios psicologia - Cómo es una madre autoritaria

Contenido

¿Qué son los padres autoritarios?

Los padres autoritarios son aquellos que se caracterizan por establecer reglas y normas exageradas, tanto dentro como fuera del hogar. Además, suelen ser poco tolerantes ante las opiniones y críticas de otros adultos o de sus propios hijos. Estos padres buscan la seguridad de sus hijos, pero muchas veces lo hacen imponiendo tareas del hogar y utilizando castigos para asegurarse de que se cumplan las reglas.

En un estudio realizado a niños y adolescentes entre 10 y 14 años, se identificaron cuatro tipologías clásicas de socialización parental: indulgente, autorizativa, negligente y autoritaria. Los padres autoritarios se caracterizan por ser poco afectivos pero controladores y exigentes.

Ventajas de ser padres autoritarios

Según el doctor Jeff Nalin, los hijos criados por padres autoritarios suelen comportarse de manera adecuada y tener seguridad física y emocional. Estos niños conocen las normas y reglas que deben seguir para alcanzar sus metas personales y académicas, y tienden a buscar sobresalir en todo momento.

Desventajas de ser padres autoritarios

Aunque ser padres autoritarios puede tener algunas ventajas, también puede tener consecuencias negativas en los niños. El énfasis en las consecuencias puede dificultar la capacidad del niño para tomar decisiones por sí mismo y afectar negativamente su autoestima. Además, el foco constante en las reglas puede llevar a los niños a desarrollar ansiedad y depresión al no tener habilidades para enfrentar situaciones o actividades que no estén relacionadas con el cumplimiento de las normas.

Los hijos criados por padres autoritarios también pueden desarrollar comportamientos rebeldes, desafiando a sus padres cuando conocen otros estilos de crianza en su entorno académico o personal.

Características de los padres autoritarios

Los padres autoritarios se caracterizan por ser muy exigentes, intransigentes y poco tolerantes. Además, pueden ser manipuladores, obsesivamente protectores, maltratadores físicos y verbales, muy críticos, poco afectuosos y culpabilizar a sus hijos de sus propios fracasos o frustraciones. También pueden concebir sus fantasías o sueños en sus hijos, planificar su carrera profesional y ser poco comunicativos. Estos padres suelen rechazar las amistades de sus hijos y no enseñarles hábitos saludables.

Reglas, castigos y beneficios

Para evitar caer en una total autoridad, se sugiere establecer límites y normas en el hogar, teniendo en cuenta las opiniones y necesidades de todos los miembros de la familia. También es importante definir las consecuencias de no respetar las reglas establecidas.

Algunas acciones que los padres autoritarios pueden considerar para guiar el comportamiento de sus hijos son:

  • Establecer reglas claras y razonables.
  • Escuchar y atender las necesidades de los hijos.
  • Proporcionar consecuencias lógicas y naturales ante el incumplimiento de las reglas.
  • Fomentar la comunicación abierta y respetuosa.
  • Motivar y elogiar los logros y esfuerzos de los hijos.
  • Enseñar hábitos saludables y promover un estilo de vida equilibrado.

Ser padres autoritarios puede tener algunas ventajas, como el comportamiento adecuado de los hijos y su seguridad física y emocional. Sin embargo, también puede tener consecuencias negativas, como la dificultad para tomar decisiones y la baja autoestima. Es importante establecer límites y normas, pero siempre teniendo en cuenta las necesidades y opiniones de los hijos.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Padres autoritarios: cómo afecta la psicología de los niños puedes visitar la categoría Psicología.

Subir