Terapia de esquemas: jeffrey young y su impacto en la psicología

Jeffrey E. Young es un reconocido psicólogo estadounidense que ha desarrollado una terapia innovadora conocida como terapia de esquemas. Esta forma de psicoterapia integrativa ha revolucionado el tratamiento de los trastornos de la personalidad, especialmente en personas con trastorno de personalidad límite (TLP). En este artículo, exploraremos en qué consiste la terapia de esquemas y cómo Jeffrey Young ha logrado impactar positivamente en la vida de muchas personas.

Contenido

Generalidades de la terapia de esquemas

La terapia de esquemas es un enfoque terapéutico que combina diferentes corrientes psicológicas, como la cognitivo-conductual, la psicodinámica y la humanista. Se ha desarrollado para abordar trastornos de la personalidad, especialmente aquellos que presentan comportamientos y pensamientos rígidos y difíciles de cambiar.

Un aspecto fundamental de la terapia de esquemas es la importancia de las experiencias tempranas en la formación de patrones de pensamiento y comportamiento. Según Young, los esquemas son patrones duraderos que se forman durante la infancia a partir de experiencias en las que no se satisfacen ciertas necesidades fundamentales. Estos esquemas generan emociones negativas y dificultades en diferentes áreas de la vida.

¿Qué implican los esquemas desadaptativos tempranos?

Los esquemas desadaptativos tempranos son patrones de pensamiento y comportamiento que se desarrollan a partir de experiencias tempranas en las que no se satisfacen ciertas necesidades fundamentales. Estos esquemas generan emociones negativas, patrones de relación disfuncionales y dificultades en diferentes áreas de la vida.

Los esquemas desadaptativos suelen afectar negativamente la vida adulta al activarse y generar situaciones repetitivas y poco constructivas en situaciones de estrés. La terapia de esquemas se enfoca en identificar estos esquemas tempranos disfuncionales y abordar las emociones intensas y desadaptativas asociadas a ellos. A través de técnicas específicas, se fomenta el cambio cognitivo y conductual para superar estos esquemas y mejorar la calidad de vida.

¿Cuáles son los esquemas?

La terapia de esquemas implica una evaluación exhaustiva para identificar los esquemas desadaptativos de cada persona. Para ello, se utilizan cuestionarios específicos diseñados para identificar los patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales. Algunos de los esquemas más comunes incluyen:

  • Autonomía deteriorada: Implica una incapacidad percibida de actuar de forma independiente y exitosa.
  • Dependencia: Sensación de necesidad excesiva de los demás para obtener apoyo y validación.
  • Fracaso: Creencia de que no se puede lograr el éxito en diferentes áreas de la vida.
  • Vulnerabilidad al daño: Temor constante a ser lastimado o rechazado.
  • Apego: Dificultad para establecer relaciones saludables y duraderas.

Activación de los esquemas: Cuando desborda el afecto

Los esquemas desadaptativos suelen activarse en momentos de tensión emocional, desencadenando respuestas de afrontamiento problemáticas. Jeffrey Young propone que estas respuestas desadaptativas son generadas por el malestar emocional que despiertan los esquemas. Es decir, cuando una persona experimenta emociones intensas asociadas a un esquema, es más probable que recurra a estrategias de afrontamiento poco saludables.

Fases del tratamiento en la terapia de esquemas

El tratamiento con la terapia de esquemas consta de varias fases, que pueden variar en duración según las necesidades de cada persona. En general, se prevén sesiones semanales, aunque esto puede variar según las preferencias del terapeuta y del paciente.

Primera fase: Evaluación y educación

La terapia de esquemas comienza con una evaluación exhaustiva para identificar los esquemas predominantes en el paciente. A partir de esta evaluación, el terapeuta dedica tiempo a entender y explicar cómo funcionan estos esquemas y cómo afectan la vida del paciente. Además, se pueden recomendar lecturas y otras fuentes de información que ayuden al paciente a comprender mejor sus esquemas y cómo trabajar en su cambio.

Segunda fase: El cambio

En esta fase, se utilizan técnicas específicas diseñadas para promover la transformación cognitiva. Estas técnicas pueden ser cognitivas, experienciales, conductuales o interpersonales, y se adaptan a las necesidades individuales de cada paciente. El objetivo es modificar los patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales asociados a los esquemas y promover cambios positivos en la vida del paciente.

Jeffrey Young ha logrado un gran impacto en el campo de la psicología con su terapia de esquemas. Esta forma de psicoterapia integrativa ha demostrado ser efectiva en el tratamiento de los trastornos de la personalidad, especialmente en personas con trastorno de personalidad límite. A través de la identificación y el abordaje de los esquemas desadaptativos, la terapia de esquemas busca mejorar la calidad de vida y promover cambios positivos en la forma de pensar y comportarse de las personas.

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