El handling en psicología es una técnica de crianza que se basa en el instinto materno y en la confianza en la relación natural entre madre y bebé. Esta forma de crianza fue desarrollada por el psicoanalista y pediatra británico Donald Winnicott, quien desafió las creencias convencionales de su época al afirmar que las madres no debían aspirar a ser perfectas, sino madres suficientemente buenas. A través de sus charlas radiales en la BBC entre 1943 y 1966, Winnicott incentivó a las madres a seguir sus instintos y a ignorar las reglas impuestas por la sociedad.
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El legado de Donald Winnicott en la psicología
Donald Winnicott fue un pionero en el campo de la psicología y la pediatría. A lo largo de su carrera, desarrolló conceptos revolucionarios que influyeron en la forma en que se aborda la crianza de los hijos. Uno de sus aportes más destacados fue el concepto de la madre suficientemente buena. Contrario a la creencia de la época de que las madres debían ser perfectas, Winnicott afirmó que la perfección no era necesaria ni beneficiosa para los bebés. En cambio, abogó por una crianza basada en el instinto materno y en la confianza en la relación natural entre madre e hijo.
Winnicott observó que las madres de bajos recursos, que no tenían acceso a los libros de crianza convencionales, setutorialn sus instintos y criaban a sus hijos sin problemas. Esto le llevó a concluir que las madres y los bebés saben intuitivamente lo que es mejor para ellos, y que no es necesario seguir técnicas o métodos estrictos de crianza. Según Winnicott, ambos, juntos, saben exactamente lo que es correcto, mejor de lo que cualquier persona externa podría saber. Esta visión desafió las creencias tradicionales de la época y abrió el camino a una forma más natural y empática de criar a los hijos.
La psicología disimulada de Winnicott
Una de las características distintivas del enfoque de Winnicott fue su habilidad para introducir conceptos psicológicos de forma sencilla y comprensible para las madres. Aunque tenía una formación en psicoanálisis y estaba interesado en las ideas de Freud, Winnicott evitaba el uso de términos técnicos y complejos. Esto le permitía comunicarse de manera efectiva con las madres y evitar el escepticismo que rodeaba al psicoanálisis en ese momento. Su objetivo era difundir sus ideas y ayudar a las madres a confiar en sus propios instintos maternales, sin sentir la presión de seguir reglas impuestas por la sociedad.
Winnicott creía en la importancia de establecer un vínculo cercano y afectuoso entre madre e hijo. Según él, nadie conoce mejor a un bebé que su propia madre, y nadie puede proporcionarle el cuidado y la atención que necesita de manera más efectiva. Esta idea desafió la noción de que las madres debían buscar consejos externos y seguir métodos preestablecidos de crianza. En cambio, Winnicott alentó a las madres a confiar en su intuición y en la relación natural que se desarrolla con sus bebés.
El concepto de la madre suficientemente buena
Una de las ideas más revolucionarias de Winnicott fue la noción de la madre suficientemente buena. Contrario a la creencia de que las madres debían ser perfectas, Winnicott afirmó que no era necesario ni beneficioso para los bebés. Según él, los fracasos y las imperfecciones en la crianza son parte natural del proceso y permiten que los niños aprendan sobre la realidad de un entorno imperfecto. Además, Winnicott argumentó que los niños que experimentan celos y aprenden a manejarlos son beneficiados por esta experiencia.
Winnicott también introdujo el concepto del objeto transicional, que se refiere a un objeto de apego, como una manta o un peluche, que el bebé utiliza para sentirse seguro y reconfortado. Para Winnicott, este objeto es una parte integral de la identidad del bebé y desempeña un papel importante en su desarrollo emocional. Esta idea desafió la creencia de que la dependencia de un objeto de apego era algo negativo y patológico, y enfatizó la importancia de permitir que los bebés se vinculen y se sientan seguros con estos objetos.
La influencia de Winnicott en la crianza
Aunque Winnicott no buscaba ser un revolucionario en la crianza de los hijos, su enfoque tuvo un impacto significativo en la forma en que se aborda la crianza en la actualidad. Sus ideas sobre la importancia del instinto materno, la relación natural entre madre e hijo y la aceptación de las imperfecciones han ayudado a muchas madres a liberarse de la presión de ser perfectas y a confiar en sus propias habilidades como madres. Además, su enfoque empático y centrado en la relación ha influido en otros expertos en el campo de la psicología y la pediatría.
El handling en psicología es una técnica de crianza basada en el instinto materno y en la confianza en la relación natural entre madre e hijo. Donald Winnicott, a través de sus charlas radiales y su enfoque sencillo y comprensible, desafió las creencias convencionales de su época y promovió una forma más natural y empática de criar a los hijos. Su legado perdura en la crianza actual y ha ayudado a muchas madres a confiar en sus propios instintos y a establecer una relación cercana y afectuosa con sus bebés.
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