El control social es un concepto amplio que se refiere a los mecanismos y estrategias utilizados por la sociedad para regular el comportamiento de sus miembros. En el campo de la psicología social, el control social se estudia desde diferentes perspectivas, analizando cómo influye en la conformidad, la obediencia y la moralidad de las personas. En este artículo, exploraremos qué es el control social, los tipos de control social y los mecanismos utilizados para ejercerlo.
El control social en psicología se refiere al conjunto de procesos y mecanismos a través de los cuales la sociedad regula y controla el comportamiento de sus miembros. Estos mecanismos pueden ser formales, como las leyes y normas establecidas por las instituciones, o informales, como las expectativas y presiones sociales.
El control social tiene como objetivo principal mantener el orden y la estabilidad en la sociedad, promoviendo comportamientos considerados deseables y sancionando aquellos que se consideran inapropiados o perjudiciales. A través del control social, la sociedad establece ciertas normas y valores que se espera que los individuos adopten y sigan.
Existen diferentes tipos de control social que se utilizan en la psicología social para influir en el comportamiento de las personas. Algunos de los tipos más comunes son:
- Control formal: Este tipo de control se basa en leyes, reglamentos y normas establecidas por las instituciones. El control formal se ejerce a través de la aplicación de sanciones legales o administrativas en caso de incumplimiento.
- Control informal: Este tipo de control se basa en las expectativas y presiones sociales. Se ejerce a través de la aprobación o desaprobación de los demás miembros de la sociedad. El control informal puede manifestarse a través de la exclusión social, el rechazo o el ostracismo.
- Control interno: Este tipo de control se refiere a la capacidad de una persona para regular su propio comportamiento en función de las normas y valores de la sociedad. El control interno implica la internalización de las normas y la autorregulación de la conducta.
Para ejercer el control social, se utilizan diferentes mecanismos que buscan influir en el comportamiento de las personas. Algunos de los mecanismos más comunes de control social son:
- Socialización: La socialización es un proceso mediante el cual los individuos adquieren las normas, valores y comportamientos aceptados por la sociedad. A través de la socialización, se busca internalizar las normas y valores de la sociedad y promover la conformidad.
- Recompensas y castigos: Las recompensas y los castigos son utilizados como mecanismos de control social para promover el comportamiento deseado y desalentar el comportamiento no deseado. Las recompensas pueden ser tangibles, como premios o beneficios, o intangibles, como reconocimiento social o aceptación.
- Presión social: La presión social se refiere a la influencia que ejercen los demás miembros de la sociedad sobre el comportamiento de un individuo. La presión social puede manifestarse a través de la conformidad a las normas sociales, el temor al rechazo o la búsqueda de aprobación.
- Control institucional: El control institucional se refiere a las normas y reglamentos establecidos por las instituciones, como el gobierno, las empresas o las organizaciones religiosas. El control institucional busca regular el comportamiento de los individuos y garantizar el cumplimiento de las normas establecidas.
El control social es un fenómeno amplio que se estudia desde diferentes perspectivas en la psicología social. A través del control social, la sociedad busca regular el comportamiento de sus miembros y promover la conformidad a las normas y valores establecidos. Los diferentes tipos de control social, como el formal e informal, y los mecanismos utilizados, como la socialización y las recompensas y castigos, son herramientas importantes para mantener el orden y la estabilidad en la sociedad.
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