En nuestra vida, hemos escuchado mucho sobre las personalidades extrovertidas e introvertidas. Sin embargo, ¿qué pasa cuando no nos sentimos identificados con ninguno de estos extremos? ¿Qué ocurre cuando nos sentimos tanto extrovertidos como introvertidos? Es en este punto donde aparece la personalidad ambivertida.
Según Carl Jung, el primer psicólogo en utilizar los términos extrovertido e introvertido, nadie es completamente uno u otro. Algunas personas muestran rasgos de ambas personalidades, estas personas son conocidas como ambivertidas.
¿Cómo se comporta una persona ambivertida?
Las personas ambivertidas pueden sentirse cómodas tanto en grupos sociales como en momentos de soledad. Son capaces de valorar el tiempo a solas, pero también disfrutan de la interacción social. Pueden mostrarse extrovertidos y abiertos con amigos y familiares, pero pueden ser más reservados y tímidos con extraños o figuras de autoridad.
Algunas características comunes de las personas ambivertidas son:
- Les gusta asistir a eventos sociales, pero no siempre sienten la necesidad de interactuar todo el tiempo.
- Disfrutan de hablar con otras personas.
- No les gusta estar solos todo el tiempo, pero tampoco programan cada minuto de su tiempo libre.
- Tienen la capacidad de seleccionar cuidadosamente a las personas que incluyen en su círculo de confianza.
- Son flexibles y tienen amigos tanto introvertidos como extrovertidos.
- Disfrutan tanto del trabajo en equipo como de las tareas individuales.
- Pueden tener dificultades para expresar sus emociones internas.
- Pueden tener dificultades para tomar decisiones.
- Les gusta entablar conversación con todo el entorno, pero profundizan una vez conocen a la persona.
Si te sientes identificado con estas características, es importante saber que la ambiversión es un rasgo funcional. Permite a las personas ser más flexibles y adaptarse rápidamente a diferentes situaciones y cambios.
Cantidad de personas ambivertidas
Las personas ambivertidas representan una gran parte de la población. Se estima que más del 60% de las personas pertenecen a este grupo. Aunque no se hable mucho de ellos, su equilibrio entre la extroversión y la introversión les permite adaptarse a diferentes situaciones y disfrutar tanto de la compañía de los demás como de la soledad.
Las características principales de las personas ambivertidas incluyen:
- Son buenos comunicadores, capaces de expresar sus ideas de manera efectiva y escuchar a los demás.
- Son flexibles y se adaptan fácilmente a diferentes ambientes y situaciones.
- Tienen la capacidad de conectar con personas de diferentes personalidades y son excelentes líderes.
- Disfrutan tanto de la compañía de los demás como de su tiempo a solas.
- Son capaces de trabajar tanto en equipo como de forma autónoma.
- Tienen un círculo amplio de amistades, pero son selectivos en cuanto a quiénes incluyen en su círculo de confianza.
Gracias a su equilibrio y flexibilidad, las personas ambivertidas son consideradas las más saludables y equilibradas a nivel psicológico. Pueden disfrutar de la tranquilidad y la acción, adaptándose a diferentes situaciones sin sentirse saturados o desesperados.
Las personas ambivertidas son capaces de disfrutar tanto de sí mismas como de los demás. Su equilibrio entre la extroversión y la introversión les permite ser más flexibles, dinámicos y adaptarse fácilmente a diferentes situaciones. Si te identificas con estas características, puedes considerarte afortunado de tener un rasgo de personalidad tan funcional y saludable.
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