Las mentiras forman parte de nuestra vida cotidiana, ya sean piadosas, intencionadas, exageradas o incluso hacia uno mismo. A veces mentimos para lograr aceptación, evitar situaciones difíciles o por miedo a enfrentarnos a la realidad. Aunque algunas personas tienen más habilidad para mentir que otras, existen trucos que los psicólogos utilizan para reconocer a un mentiroso tan solo mirándole a la cara.
Pestañea rápidamente
Según Mark Bouton, un sociólogo que trabajó para el FBI durante más de 30 años interrogando a ladrones y criminales, una persona pestañea aproximadamente una vez cada 10 o 12 segundos, es decir, unas cinco o seis veces por minuto. Sin embargo, cuando una persona se encuentra estresada o mintiendo, el número de parpadeos aumenta considerablemente. Puede llegar a pestañear hasta seis veces seguidas en un corto periodo de tiempo.
Cerrar los ojos durante más de un segundo
Bouton explica que cerrar los ojos durante más de un segundo es un mecanismo de defensa del ser humano y puede indicar que la persona te está mintiendo. Por lo general, el parpadeo no dura más de 400 milisegundos (0,40 segundos).
La dirección de la mirada
La dirección de la mirada también puede revelar si una persona está mintiendo. Según Bouton, una persona diestra tiende a mirar hacia arriba y hacia la izquierda cuando intenta acceder a sus recuerdos. Sin embargo, si mira hacia arriba y hacia la derecha, podría estar accediendo a su imaginación y, por lo tanto, mintiendo. Los zurdos reaccionan de manera opuesta.
Bouton destaca que si se le pregunta a un diestro por algo que ha escuchado, sus ojos se moverán hacia la oreja izquierda para recordar lo que ha oído. Sin embargo, si está a punto de mentir, sus ojos se moverán hacia la oreja derecha.
En cuanto a mentir sobre un olor, un tacto o una sensación, las personas diestras moverán sus ojos hacia abajo y hacia la derecha si están mintiendo. Pero si intentan decir la verdad y recordar esa sensación, mirarán hacia abajo y hacia la izquierda.
Sudoración excesiva
En algunos casos, el cuerpo puede reaccionar ante la mentira acelerando el proceso de sudoración. Si percibes sudor en la frente o las mejillas de tu interlocutor y sospechas de sus palabras, es posible que estés en lo correcto.
Frunce los labios
Cuando una persona miente, su boca tiende a secarse. Para superar esta sequedad, el mentiroso puede fruncir o contraer los labios haciendo un movimiento de succión, según explica Bouton.
Los psicólogos utilizan estos trucos visuales para ayudar a detectar las mentiras de las personas. Sin embargo, tener en cuenta que estos signos no son definitivos y pueden variar de una persona a otra. La detección de mentiras es un proceso complejo que implica analizar múltiples factores, como el lenguaje corporal, el tono de voz y la congruencia de la historia.
- ¿Existen otras señales que los psicólogos utilizan para detectar mentiras?
Sí, además de los trucos visuales mencionados, los psicólogos también prestan atención al lenguaje corporal, el tono de voz, la congruencia de la historia y otros indicadores no verbales.
- ¿Puede una persona mentirosa aprender a controlar estos signos?
Algunas personas pueden aprender a controlar ciertos signos de mentira, pero es difícil eliminar todos los indicadores. Los psicólogos capacitados en detección de mentiras pueden utilizar técnicas más avanzadas para evaluar la veracidad de una persona.
- ¿Por qué es importante detectar las mentiras?
La detección de mentiras puede ser útil en diferentes contextos, como la detección de criminales, la resolución de conflictos y la toma de decisiones basadas en información precisa.
Los psicólogos utilizan una combinación de trucos visuales y análisis de lenguaje corporal para detectar mentiras. Sin embargo, es importante recordar que estos signos no son definitivos y deben ser interpretados en conjunto con otros factores. La detección de mentiras es un campo complejo y en constante evolución, que requiere habilidades y experiencia para ser aplicado de manera efectiva.
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