La película Fragmentado, dirigida por M. Night Shyamalan, es un thriller de terror que aborda el trastorno de identidad disociativo, también conocido como trastorno de personalidad múltiple. El filme se centra en Kevin Wendell Crumb, interpretado por James McAvoy, un hombre que alberga veintitrés personalidades diferentes en su interior. A lo largo de la trama, estas personalidades luchan por tomar el control, desencadenando situaciones de violencia y terror.
Un vistazo a la trama
La mente humana es extremadamente compleja, y en respuesta a traumas y situaciones dolorosas, puede generar mecanismos de defensa para protegerse. En el caso de Kevin, su trastorno disociativo surge como una forma de escapar del dolor causado por un pasado marcado por el abuso sexual, la violencia y la crueldad. Este trastorno se manifiesta en la convivencia de múltiples personalidades dentro de un mismo individuo.
En la película, presenciamos cómo tres de las veintitrés personalidades de Kevin luchan por dominar su comportamiento. Cada una de estas personalidades tiene sus propios patrones de conducta, habilidades y enfermedades. Entre ellas, destacan Dennis, un hombre obsesivo y compulsivo; Barry, un diseñador de moda homosexual; Patricia, una fanática religiosa y Hedwig, un niño con una personalidad inocente y admirador del rapero Kanye West.
La trama se desarrolla como un thriller psicológico y de suspenso, manteniendo la tensión y, a su vez, generando momentos de risa. La película despierta emociones y nos invita a reflexionar mientras observamos la aparición de la personalidad número 24, conocida como la bestia.
El mensaje de la película
Según el director M. Night Shyamalan, el personaje de Kevin fue concebido hace aproximadamente 15 años y fue rescatado para crear una película completa. El trastorno disociativo es uno de los trastornos mentales más documentados científicamente, y el objetivo de la película es mostrar su versión más extrema: la capacidad de separación mental y la habilidad para enfocarse en lo que se cree, considerándolo como un superpoder.
Somos lo que creemos que somos, es el mensaje principal de Fragmentado. La película nos invita a reflexionar sobre cómo nuestras creencias y percepciones moldean nuestra realidad. Si nos centramos en pensamientos negativos y en la versión más oscura de nosotros mismos, es probable que eso sea lo que recibamos en nuestra vida.
Es importante destacar que Shyamalan suele hacer cameos en sus películas, y en Fragmentado lo vemos interpretando el papel del conserje del edificio donde se encuentra el consultorio de la doctora que trata a Kevin. Este detalle añade un toque personal y lúdico a la historia, y también hace referencia a otra de sus películas, Unbreakable (El protegido), estrenada en el año 2000.
Fragmentado es una película que aborda de manera intrigante y perturbadora el trastorno de identidad disociativo. A través de una trama llena de suspenso y terror, nos sumergimos en la complejidad de la mente humana y en la lucha interna de un individuo con múltiples personalidades. Además, nos invita a reflexionar sobre el poder de nuestras creencias y la influencia que tienen en nuestra vida.
Esta película nos muestra una versión extrema de un trastorno mental, pero también nos deja en claro que la mente humana es un universo vasto y enigmático. Nos recuerda que cada persona tiene su propia historia y que es importante comprender y respetar las experiencias y luchas internas de los demás.
Fragmentado es una película que combina el terror psicológico, el suspenso y la reflexión. Es una obra cinematográfica que nos hace cuestionar nuestra propia percepción de la realidad y nos muestra la importancia de aceptar y comprender la complejidad de la mente humana.
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